Sunday, December 13, 2009

Mañanas filosóficas

Todavía no va a despertarse. Antes… sí… siempre hace eso antes. Deja de respirar un par de segundos, y cuando parece que va a ahogarse, abre los ojos, pero todavía no ve nada. Lo miro, como ahora, de costado. Parece un gato bebé. Sus ojos están vacíos por un momento. Después empiezan a humedecerse y van volviéndose cada vez más oscuros. Apenas comienzan a llenarse de él, me dicen que me vaya. Pero yo hago como que nos los oigo. Es ese vacío, el de cuando todavía no ve nada, el que logra dejarme así, como queriendo entender por qué el amor.

3 comments:

k said...

grsoso el post este!

saludos

Joaquin said...

Hola qué tal? estuve viendo algunas cosas en tu blog. Trabajo con posicionamiendo web y tengo una propuesta de publicidad : 50 euros cada mes por incertar pequeños links de nuestros anunciantes. Son 50 euros mensuales para cada blog que se registre con nosotros.Es compatible con publicidad de google-
Saludos -comunicate-

Eugenia Rombolá said...

Gracias Quinito.

Un beso,

Eugenia